[vc_row][vc_column][vc_column_text]Este verano 2020 viene marcado por las repercusiones del COVID-19, pero esto no quiere decir que nos quedemos sin vacaciones.
Este año ya sabemos que tenemos que olvidarnos de la Festa do Albariño tal y como la conocemos, cierto. Se han limitado los aforos en los locales de hostelería, playas, comercios… debemos evitar aglomeraciones y disfrutar de nuestras vacaciones con “sentidiño”. Todo esto es así, pero Cambados nos ofrece un sinfín de posibilidades que debemos aprovechar este verano 2020.
Cambados cuenta con uno de los conjuntos históricos mejor conservados de toda Galicia y presume de ser, además, la capital gallega del Albariño.
Un simple paseo por sus callejuelas y te aseguramos que quedarás prendado/a de este pueblo marinero.
En este paseo por Cambados percibirás que no existe un único centro histórico sino tres. ¿A qué se debe esto? A que Cambados nace de la fusión de tres villas: Fefiñáns, Santo Tomé do Mar y Cambados. Muy diferentes entre sí.
Fefiñáns
Se trata de un conjunto arquitectónico realmente hermoso y muy bien conservado. Destacamos el Pazo de Fefiñáns, declarado Bien de Interés Cultural en el 2012, el arco-puente, la atalaya Torre del Homenaje y la Iglesia de San Benito.
El pazo de Fefiñáns se empezó a construir en el S. XVI por encargo de Juan Sarmiento y Valladares, señor de Fefiñáns, consejero del rey Felipe II y fue terminada por su sobrino y su sobrino nieto en el siglo XVII. De estilo renacentista, destaca una gran torre almenada sobre su estructura en forma de “L”, donde lucen sus famosos balcones.
Este pazo alberga en su interior dos bodegas pertenecientes a la Ruta del Vino Rías Baixas. Estas son “Palacio de Fefiñanes” y “Joaquín Gil Armada”, heredera de uno de los viñedos más antiguos de la zona de O Salnés y que dieron origen, nada más y nada menos, que al primer Albariño embotellado a principios del S. XX.
Y es que por algo Cambados es conocido como la cuna del Albariño.
En este conjunto arquitectónico podemos encontrar también el Museo Molino de Mareas a Seca, la Pza de As Rodas (lugar de tapeo muy recomendado) y la Pza Francisco Asorey. También el Pazo de Torrado, el de A Calzad (Oficina Municipal de Turismo desde 2013) y el de Bazán (hoy Parador Nacional de Turismo de Albariño).
EL CAMBADOS ANTIGUO
En el casco antiguo de Cambados podemos encontrar verdaderas joyas.
La Casa Consistorial, la Pza de Ramón Cabanillas, la Pza de Alfredo Brañas, el Convento de San Francisco… son solo algunos ejemplos.
Podréis contemplar también varios pazos o casas señoriales como el Pazo de Fajardo (S. XVII) o el Pazo de Ulloa.
Y, por supuesto, una visita obligada a las ruinas de Santa Maríña Dozo, nuestra patrona, que encontraremos en la falda del monte de “A Pastora”. De estilo gótico marinero, aunque podemos encontrar también rasgos renacentistas.
De su interior destaca la decoración con bolas sobre los arcos y capillas y sus iconografías en relieve.
La iglesia fue desprovista de su cubierta y abandonada en el S.XIX y sus restos fueron declarados Monumento Nacional en 1943.
La escena es realmente impresionante. De hecho, si te gusta la fotografía este es un lugar muy interesante para sacar fotos.
Al haber sido destechada sus hermosos arcos han quedado desnudos y, justo delante, se alza un cementerio muy especial que forma parte de la Asociación de Cementerios Singulares de Europa y que ya en gran Álvaro Cunqueiro había descrito como “el más melancólico camposanto del mundo”
Fotógrafos, escritores… aquí podéis hayar una gran fuente de inspiración.
Muy cerca, subiendo por un camino, podremos llegar a la Ermita de A Pastora, desde donde podremos disfrutar de una hermosa panorámica de la Ría de Arousa y los viñedos de la zona.
Santo Tomé do Mar
La zona más marinera de Cambados y donde el pueblo se funde con el mar. Sin duda, esta tranquila villa tiene el encanto especial que solo tienen los pueblecitos marineros de Galicia.
Además de pasear tranquilamente por sus calles, vale la pena visitar el Museo Casa do Pescador, una antigua casa marinera rehabilitada con una exposición de útiles de pesca y marisqueo de la zona.
Encontramos también el Pazo de Montesacro, de estilo barroco… pero, sin duda, lo más característico de Santo Tomé son las ruinas de la Torre de San Sadurniño. Uno de los bastiones que defendían la ría de Arousa y el camino a Santiago de Compostela de los vikingos. Esta torre es lo único que queda en pie de una fortaleza destruida en las revueltas Irmandiñas (finales S. XV).
Marisqueo, gastronomía, bodegas…
Por supuesto, Cambados es mucho, mucho más. Es gastronomía, es vino, es marisqueo, es cultura…
Podrás hacer senderismo, disfrutar de actividades acuáticas o al aire libre, de sus playas y paisajes…
Y por supuesto, encontrarás lugares con encanto para hospedarte como O Lar da Avoa. Un alojamiento rural con todas las comodidades y preparado con los protocolos más exigentes frente a la propagación de COVID.
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¿Te animas?[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
